En España, Europa y en todo el mundo, la gente tiene un/a ídolo al que adora. En los tiempos que corren, las personas empiezan a tener en un altar, a gente que no ha hecho ninguna hazaña y tiene una actitud vergonzosa. Gente que es patética, que no tiene formación alguna y que se dedica a vivir de otras personas aún más patéticas que la/e adoran. Los famosos de televisión sobre todo son a los que más aclama la gente y los que más vergonzosos son. Además la televisión "ayuda", me explico, la televisión lo que hace es convertir en cuestiones de estado la vida de los famosos, a los que no hay que llamar famosos porque son gente como los demas, que es igual o menos interesante incluso que la de la gente común.
Pero los verdaderos culpables de que la mediocridad predomine en los medios de comunicación somos nosotros, que aún así los seguimos viendo, escuchando, leyendo, etc. Si pensamos un poco, aparte de ser un caso de " tontuna", es un caso que las personas no tenemos personalidad y la poca que tenemos cada día se hace más pequeña.
De esta reflexión podemos sacar dos conclusiones:
1-Que todos somos igual de importantes que los demas.
2-Que (aunque ya lo haya dicho en artículos anteriores ) somos demasiado TONTOS
*Les informa el Señor X.
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